James Joyce (1882-1941) es un renombrado escritor y poeta irlandés reconocido por su agudo análisis psicológico y sus innovadoras técnicas literarias. Su influyente novela Ulises, una epopeya en la que presenta un retrato vívido de la vida en Dublín, lo ha convertido en una figura destacada en la literatura del siglo XX.
Nacido el 2 de febrero de 1882 en Dublín, Joyce creció en una familia humilde. En 1904, dejó su ciudad natal junto a Nora Barnacle, una camarera con quien más tarde se casaría. Juntos, criaron a sus dos hijos mientras vivían en Trieste, París y Zürich, sobreviviendo gracias a su trabajo como tutor de inglés y los préstamos de amigos. En 1907, Joyce sufrió un grave ataque de iritis, una enfermedad ocular que casi lo deja ciego.
Su primera novela, Retrato del artista adolescente (1916), es en gran medida autobiográfica y relata la juventud y la vida familiar del protagonista, Stephen Dedalus. Aunque Joyce tuvo dificultades para encontrar un editor inglés para su obra, fue Harriet Shaw Weaver, directora de la revista Egoist, quien decidió publicarla por su cuenta, imprimiéndola en Estados Unidos. En esta obra, Joyce utiliza extensivamente el monólogo interior, una técnica literaria que permite explorar los pensamientos, sentimientos y sensaciones de un personaje de manera realista. Durante esta época, también escribió su obra de teatro Exiliados (1918).
La fama internacional llegó en 1922 con la publicación de Ulises, una novela que se basa en la Odisea de Homero y narra las vidas de Leopold Bloom, un judío irlandés, y Stephen Dedalus en el transcurso de un día. El climax de la historia es el encuentro entre ambos personajes. El tema principal de la novela es la búsqueda simbólica de un hijo por parte de Bloom y la creciente conciencia de Dedalus acerca de su vocación como escritor. Joyce lleva la técnica del monólogo interior aún más lejos en Ulises, combinándola con el uso de la caracterización oral y la parodia de diferentes estilos literarios como método narrativo global. Posteriormente, escribió otra obra monumental: Finnegans Wake (1939).
Después de vivir veinte años en París, Joyce se trasladó a Zürich cuando Alemania invadió Francia al principio de la Segunda Guerra Mundial. Allí falleció el 13 de enero de 1941. Su legado perdura como uno de los escritores más influyentes y visionarios del siglo XX.