En Las curvas del amor, nos encontramos con Cameron Collins, una joven que en su adolescencia mantuvo su peso bajo control y se ejercitó constantemente con el objetivo de llegar a desfilar en las prestigiosas pasarelas de la moda. Poseía belleza, estatura y una medida de caderas superior a los 100 cm, una característica que despertaba el deseo del sexo opuesto pero que no encajaba en la exigente industria de la moda, la cual la rechazó de manera cruel por considerarla gorda. Este hecho marcó el destino de Cam, convirtiéndola en una chica introvertida, insegura y sumergida en una espiral autodestructiva para su salud.
Cerca de los 30 años, Cam se refugia en su estudio de tatuajes, resignada a que el chocolate sea el amor de su vida. Sin embargo, el destino le brinda una oportunidad única para alcanzar su sueño de desfilar en las pasarelas y también conocerá a Keith Grant, un hombre perseverante, práctico y dotado de una habilidad casi innata para conseguir que las personas sigan sus consejos y deseos. Keith creció en una familia en la que los deportes son tan sagrados como la propia familia o la comida. De no haber sido por una lesión que sufrió en la final de la temporada universitaria de fútbol, habría tenido una exitosa carrera en la NFL. Sin embargo, esta lesión lo llevó a convertirse en un reconocido entrenador con su propio sistema de ejercicios y alimentación.
Gracias a su éxito profesional, Keith es elegido para la importante tarea de devolverle a Cameron la motivación para luchar por su sueño y, lo más importante, aprender a amarse a sí misma. ¿Será capaz Keith de enseñarle a Cameron que el chocolate no es la única forma de calmar sus ansiedades? ¿Será ella quien le enseñe a Keith que hay que luchar por aquello que se ama? Quizás ambos recibirán la lección más valiosa de sus vidas.
Con una puntuación de 4.4 sobre 5 y una duración de 6 horas y 49 minutos, Las curvas del amor promete ser una historia llena de superación, amor propio y enseñanzas fundamentales para la vida.