En Valencia nació, el 29 de enero de 1867, un hombre llamado Vicente Blasco Ibáñez. Este hombre vivió una vida llena de política, literatura y amor por las mujeres. Era un escritor extremadamente rápido. Su deseo era que su vida fuera su mejor novela, y lo logró. Fundó el periódico El Pueblo en Valencia, fue diputado en varias ocasiones y se vio envuelto en duelos en repetidas ocasiones. En uno de estos duelos estuvo cerca de perder la vida, pero gracias a que la bala golpeó la hebilla de su cinturón, logró sobrevivir. Tuvo amores apasionados. En 1909, viajó a Argentina y fundó dos ciudades. Años más tarde, se instaló en París, coincidiendo con el inicio de la Primera Guerra Mundial. Allí recibió el encargo personal del Presidente Poincaré de escribir una novela sobre la guerra. Y así nació Los cuatro jinetes del Apocalipsis, una novela que cautivó al público estadounidense y llegó a ser más leída que la Biblia misma. Murió en Menton, Francia, el 28 de enero de 1928, a los 61 años de edad.
Los cuatro jinetes del Apocalipsis, escrita por Vicente Blasco Ibáñez durante la horrorosa Gran Guerra, retrata de manera brillante las diferentes fuerzas, intereses y mentalidades que llevaron al estallido de la Primera Guerra Mundial. La novela se centra en la historia de dos familias, los Desnoyers y los Hartrott, quienes, aunque tienen un árbol genealógico en común, pertenecen a bandos opuestos del conflicto. Con una narración ágil, la novela recorre los escenarios infernales de una Europa destrozada, donde Blasco, un vitalista por naturaleza, hace sentir la desesperación de vivir como algo salvaje e invencible.