El declive es un fenómeno que puede ser detectado, evitado e incluso revertido. Jim Collins, reconocido académico del mundo empresarial, dedicó cinco años a investigar las claves de las empresas que sobresalen, convirtiéndose en un éxito internacional con su libro publicado en 2001. Sin embargo, tras la caída de gigantes como Lehman Brothers o Enron, Collins decidió adentrarse en el estudio de los factores que llevan a las grandes compañías a la ruina.
En su nueva obra, Empresas que caen, Collins nos brinda un exhaustivo análisis sobre cómo detectar y corregir el declive empresarial. ¿Es posible anticiparse a él? ¿Cuán profundo puede caer una empresa antes de que su recuperación sea imposible? ¿Qué hacer para corregir una mala situación?
Para responder a estas preguntas, es fundamental identificar los síntomas y las fases de la caída. Solo así seremos capaces de predecirla y detenerla a tiempo. Collins establece cinco fases clave:
- Arrogancia nacida del éxito.
- Persecución indisciplinada del crecimiento.
- Negación del riesgo y el peligro.
- Búsqueda desesperada de la salvación.
- Capitulación: ser insignificante o morir.
Collins nos muestra que, independientemente del tamaño de la organización, ninguna empresa está exenta de ser vulnerable. No existe ninguna ley que garantice la supervivencia, pero algunas compañías logran salir fortalecidas de las crisis.
Con una puntuación de 4.1/5 y una duración de 6 horas y 10 minutos, Empresas que caen promete ser una guía indispensable para entender y evitar el declive empresarial. El autor, junto con Javier Cisa, nos sumerge en un viaje lleno de ejemplos, casos de estudio y valiosas lecciones que nos ayudarán a proteger nuestras organizaciones y fomentar su crecimiento sostenible.