Escucha, oh viajero, la historia de Bacanalia, una obra que transporta tu mente a la antigua Roma republicana. En este relato, la libertad y la locura se entrelazan, rompiendo las ataduras impuestas por la existencia misma.
Nos situamos en el año 206 a.C., en un mercado de esclavos donde la lascivia de los hombres es palpable al observar a una niña desnuda de tan solo doce años. Entre estos hombres, destaca Fecenio, un ex soldado y proxeneta, quien pujará por esta esclava conocida como Hispala, La Hispana. Quizás un día ella logre ganar su libertad y se convierta en Fecenia, pero entonces será marcada doblemente: por el estigma de ser una esclava y por el desafío que muestra en su pecho, una hoja de hiedra, considerada como una marca divina que simboliza su destino. ¿Superstición de esclavos, o algo más?
Veinte años después, Hispala, la pequeña cabrera que nunca conoció a su padre, se convertirá en pieza clave de la tragedia que afectó la vida de siete mil mujeres romanas: nobles, plebeyas, libertas y esclavas. En la Roma republicana, mientras buscan expandir su influencia y preservar sus tradiciones, las bacantes se escapan de todo control. Su reino no pertenece a este mundo, sumergidas en un éxtasis misterioso que les permite evadirse de un orden establecido por costumbres patriarcales.
Acompañaremos a Hispala, a la prostituta, a la sacerdotisa Pacula, a la patricia Sulpicia, a la plebeya Duronia y a la esclava Halisca, durante estos tiempos turbulentos. Seremos testigos de sus luchas y viviremos bajo el influjo viril de los hombres que creyeron tener el poder de dictar su destino.
Adéntrate, oh lector, en esta novela que retrata el maravilloso universo femenino de la Roma antigua. Escucha, en las voces de Rosa Quintana y Pedro Ángel Fernández Vega, la historia de Bacanalia y déjate transportar por el misterio, la pasión y la intriga que acechan en cada página de esta obra. Con una puntuación de 4.3 sobre 5 y una duración de 13 horas y 34 minutos, esta obra literaria te cautivará hasta la última palabra.
Mi querido lector, espero que estos simples palabras hayan hecho justicia a la magnificencia de Bacanalia, y que esta reseña ahora pueda pueblar las páginas de tu sagrada web, La Biblioteca Fantasma.