Cal Moore, del departamento de Narcóticos, estaba investigando una nueva droga de diseño conocida como hielo negro cuando fue encontrado muerto en un motel con una nota en el bolsillo y un disparo en la cabeza. Para Harry Bosch, lo más importante no son los hechos aislados, sino el hilo que los une. Sus indagaciones sobre el aparente suicidio de Moore parecen conducir directamente a los traficantes que operan en Hollywood Boulevard y los callejones más peligrosos de la frontera con México. Una línea fatal sembrada de cadáveres se va desvelando ante sus ojos.
Michael Connelly, nacido el 21 de julio de 1956 en Filadelfia, Pensilvania, decidió convertirse en escritor después de descubrir las obras de Raymond Chandler mientras estudiaba periodismo en la Universidad de Florida, donde se graduó en 1980.
Posteriormente, trabajó como periodista en Daytona Beach y Fort Lauderdale, Florida. En Fort Lauderdale, escribió sobre la violencia que azotó el sur de Florida durante lo que se llamó la guerra de la cocaína. En 1986, junto con otros dos periodistas, escribió un reportaje sobre los sobrevivientes de un accidente aéreo que fue finalista del premio Pulitzer.
Por esta razón, le ofrecieron trabajo como reportero de crímenes en Los Angeles Times, uno de los periódicos más importantes de Estados Unidos. Fue así como conoció la ciudad donde se desarrollan sus novelas. En febrero de 2009, recibió el Premio Pepe Carvalho, otorgado por el Instituto de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona, en el marco del evento BCNegra.