Nieves ejerce su labor como médico rural en un pequeño pueblo de Aragón. A pesar de no ser su destino soñado, ha trabajado con entusiasmo durante dos años, manteniendo una distancia emocional con sus pacientes. Sin embargo, todo cambia cuando se encuentra con Jacinta, una maestra de un pueblo vecino, que le pide ayuda para diagnosticar los extraños síntomas de una de sus alumnas, Micaela. La niña sufre de ausencias preocupantes que pronostican algo terrible.
Nieves y Jacinta establecen una amistad, fruto de la soledad de una y el duelo reciente de la otra. Su preocupación por Micaela se convierte en la base de esta relación que quizás no habría ocurrido en otro lugar y en otras circunstancias. Sin embargo, la obsesión de Nieves por descubrir el origen del síndrome de Micaela pondrá a prueba la fortaleza de esta amistad en más de una ocasión.
Sin ser consciente de lo que se adentra, Nieves descubre que detrás del extraño comportamiento de la niña se esconden secretos que atormentan a los habitantes del lugar desde hace medio siglo: heridas abiertas de la Guerra Civil, la guerrilla, el maquis, persecuciones despiadadas... A través de diarios encontrados y las revelaciones de la abuela de Micaela, la joven doctora va tejiendo un complicado entramado donde faltan piezas fundamentales. Desenterrar el olvido puede resultar tan difícil como desenterrar a los muertos. A pesar del precio que deberá pagar, Nieves luchará por conseguir ambas cosas.