Molly Lane ha fallecido, a los cuarenta y seis años de edad. Ella era una mujer de gran libertad, seductora en todos los sentidos. En su entierro, se encuentran reunidos los hombres más importantes en su vida: Clive Linley, un famoso músico; Vernon Halliday, un periodista y director de uno de los periódicos más influyentes del país; George Lane, el poderoso y multimillonario esposo de Molly; y Julian Garmony, un notorio político de derecha, actual ministro de Asuntos Exteriores y candidato a primer ministro.
Clive y Vernon son amigos desde los lejanos y felices años sesenta, y ambos tuvieron una relación amorosa con Molly cuando eran jóvenes, idealistas y pobres. George, el marido, llegó tarde a la vida de esta fascinante mujer y nunca pudo poseerla por completo, excepto en los terribles momentos finales, cuando ella sufrió la pérdida de memoria y la decadencia mental, y él se volvió su implacable cuidador y carcelero. Con respecto a Garmony, representante de la derecha más radical, tanto Vernon como Clive no pueden entender qué atracción encontraba Molly en él ni qué extraña relación los unía.
Pero todo se desvela pocos días después, cuando George le ofrece a Vernon unas fotos espectaculares del futuro primer ministro vestido con ropa provocativa de mujer. Estas fotos, tomadas por Molly, serán el detonante de esta feroz, cínica y mordaz fábula moral.
A pesar de su oscuridad, o tal vez gracias a ella, Amsterdam es una novela extremadamente divertida. Ian McEwan satiriza nuestra sociedad contemporánea con una brillantez e inteligencia pocas veces igualadas... (Alain de Botton, The Independent).
Su novela más divertida y también la más letal hasta la fecha... Amsterdam es una dura crítica de la naturaleza humana, con referencias especiales a la generación de los años sesenta. McEwan es uno de los escritores ingleses más originales, a pesar de no parecer interesado en la escritura experimental. Su prosa es precisa y reveladora, y todo lo que describe se nos muestra como algo nuevo, sorprendente y luminoso, como un cuadro familiar recién limpiado y restaurado (Gabriele Annan, The New York Review of Books).
Una fábula moral extremadamente inmoral, contada con irónica distancia y un argumento impecable y lleno de suspense, que despliega una elegante estructura para el deleite del lector. Me recuerda a las mejores obras de Chesterton y Huxley, y también encuentro en ella ecos de Henry James (A.S. Byatt, The Literary Review).
Una obra maravillosamente orquestada por un maestro de la literatura (Phil Baker, Times Literary Supplement).