Mozart sufría del síndrome de Tourette, lo cual lo llevaba a expresarse de forma compulsiva en términos escatológicos. Las primeras notas de la Quinta Sinfonía de Beethoven tienen una equivalencia en código morse: tres puntos y una raya, que significa V de victoria, y fueron utilizadas como código durante la Gran Guerra Europea. Rossini tenía la habilidad de leer una partitura de derecha a izquierda y de abajo a arriba. Wagner engañó a Luis II para que le construyera un teatro en Bayreuth, donde debía llegar desde Inglaterra un enorme dragón de cartón-piedra para el estreno de Sigfrido, pero terminó en Beirut. Estas son solo algunas de las numerosas anécdotas que circulan, pero no pasan de ser simples cotilleos.
Este audiolibro busca brindar respuestas más profundas sobre los claroscuros de algunos de los grandes compositores, y hacer comprensibles muchas de las preguntas que rodean a la música clásica. ¿Es necesario tener algún conocimiento previo para apreciar el contenido de una melodía? ¿Es este un arte diseñado exclusivamente para las élites y consumido por minorías? ¿Son Monteverdi, Bach o Schoenberg como marcianos en un mundo sediento de inmediatez y ajeno a discursos intelectuales profundos? Pero, ¿acaso los compositores no sufrieron algo similar en su tiempo, aunque por diferentes razones? ¿Se ha convertido la música clásica en una industria cultural sin sentido? ¿Es incompatible comprender y disfrutar cuando se escucha música culta? ¿Qué autores se deben escuchar? ¿Son todos igual de recomendables? ¿Existen tops como en el mundo del rock? Estas preguntas y muchas más son desafíos interesantes que se plantean. Pero siempre hay respuestas. Este audiolibro, escrito por un reputado experto en la materia, pretende arrojar luz sobre la música clásica, pero principalmente sobre los secretos de su apreciación, de manera rigurosa pero divulgativa.
¿Sabías qué sucedió en el estreno de La traviata o que Bach murió ciego y que Stravinski padecía de hipocondría severa? Este relato gira en torno a los prodigiosos creadores y a algunas de sus obras imprescindibles, y echa un vistazo a los entresijos de sus muchos acordes y desacuerdos.