Luca:
Cuando entro a mi oficina y veo a Emma Green esperándome se me detiene el mundo. Durante años intenté convencerme de que dejarla ir fue la mejor decisión que tomé en mi vida, pero al tenerla frente a mí, toda esa confianza desaparece instantáneamente y mi cuerpo anhela desesperadamente volver a tenerla. Ella siempre ha sido mi talón de Aquiles, con su arte, sus colores y su luz, todo lo que atrae a un ser sombrío y silencioso como yo. Pero después de tantos años, tal vez considero darle una segunda oportunidad.
Emma:
La gárgola gótica, así solía llamarlo cuando íbamos juntos al colegio y pasábamos largas tardes juntos, él leyéndome a sus filósofos favoritos y yo dibujando sin parar. De la amistad al amor, del amor a la pasión, y de la pasión al desamparo. El día en que todo terminó entre nosotros, me di una palmadita en el hombro y me felicité por haber tomado la decisión más madura posible. Ahora, muchos años después, lo vuelvo a encontrar, más serio, elegante y hermoso que nunca. No sabía cuánto lo había extrañado hasta que lo vi. Ahora estoy empezando a pensar que esa no fue la decisión más madura, sino la decisión que arruinó mi vida.