En los tiempos difíciles de una nación devastada por la guerra y la sequía, un humilde pueblo luchaba por sobrevivir. La gente vivía de su propio trabajo en un mundo lleno de adversidades, pero la esperanza brilló fugazmente cuando un anciano llegó a su tierra a bordo de dos burros cargados de provisiones y mercancías.
Este anciano, con la sabiduría y experiencia de los años, no solo trajo consigo productos tan necesarios para la subsistencia, sino que también ofreció préstamos de dinero e incluso herramientas y enseres. Se convirtió en la fuente de salvación para aquellos que, en medio de la desesperación, necesitaban un respiro económico o un medio para seguir adelante.
La presencia de este misterioso viejo conmovió a los habitantes del pueblo, quienes depositaron todas sus esperanzas y confianza en él. Su generosidad y su capacidad para multiplicar riquezas parecían ser inagotables, y pronto su fama comenzó a extenderse más allá de las fronteras del pequeño asentamiento.
Sin embargo, a medida que el tiempo avanzaba, algunos comenzaron a cuestionar la verdadera naturaleza del anciano. ¿Cómo era posible que tuviera tantos recursos, y por qué siempre estaba dispuesto a ayudar? Estas sospechas crecieron y se convirtieron en temor, pues dentro de cada acto benevolente se oculta siempre la posibilidad de un oscuro propósito.
En El aprendiz, Ana María Matute nos sumerge en un relato lleno de intriga y sorpresas, donde los límites entre el bien y el mal se vuelven difusos. Con una prosa cautivadora y una trama que nos mantiene en vilo, nos adentramos en un mundo donde la desesperación se entrelaza con la esperanza y la bondad puede esconder un amargo desenlace.
Valoración: 5/5. El aprendiz es un audiolibro que, a través de la narración de Neus Sendra, nos transporta a un universo lleno de suspenso y emotividad. Con una duración de 29 minutos, nos sumergimos en la historia desde el primer instante y nos dejamos llevar por la magistral pluma de Ana María Matute. Recomendado para aquellos amantes de la fantasía y el misterio.